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medios de control o de informacion,segun se mire,por lo que vemos

los medios de comunicación y el control de la información


Hay un asunto de gran alcance político, económico,social, y por consiguiente, de relevancia para la filosofía materialista en las sociedades del presente y es el que tiene que ver con el papel de los medios de comunicación

Si miramos los contenidos de este sitio http://www.impunidad.com/casos_por_pais.php?idioma=sp por ejemplo, echamos de menos las referencias a casos tan graves de agresiones y asesinatos de periodistas como el del español José Couso en la guerra de EEUU y sus aliados contra Irak
VER enlace a noticia actual en periodistadigital

El caso de la italiana Sregna que salvó la vida al interponer su cuerpo el guardaespaldas que murió al disparar un marine en un control en el aeropuerto de Bagdad y muchos otros similares, no son mentados en el Proyecto impunidad citado al comienzo, No es en vano que este sitio sobre impunidad esté fabricado en los talleres de la SIP SIAPA, sede de los headquarters en Miami, por un casual

Sin embargo, si tiramos de la dialéctica – dialéctica lógica y además , dialéctica de clases y Estados- tenemos una interesante opción para informarnos sobre control de la comunicación en estos trabajos http://www.minci.gob.ve/libros_folletos/6/441507/?desc=terrorismo_mediaticofinalweb.pdf

Más dialéctica en este sitio http://sociedadhibrida.blogspot.com/2008/04/de-medios-en-el-salvador-y-el-mundo.html
dedicado a sociología de la comunicación y el libro esclarecedor y preciso titulado la intoxicación lingüística

Artículo de Gregorio Selser sobre el tema del control de la información y la comunicación en el que se comprueba el modus operaqndi de los grandes medios in medias res y un artículo de Eliseo Rabadán titulado orden y conexión en la comunicación en que se hace mención a los problemas de la relación entre las capas de las sociedades políticas, la democracia procedimental y el papel de los medios de comunicación

Gustavo Bueno- el más importante filósofo de España en los últimos 50 años, autor de libros sobre la televisión como Televisión:apariencia y verdad y Telebasura y democracia, nos propone en el artículo titulado Sobre las élites de periodistas en la democracia coronada un demoledor estudio sobre el mismo tema con otros vectores en consideración, además del que pretende defender tan vehementemente la SIP

Un autor que nos parece de importancia para estudiar dialécticamente el tema que nos ocupa, es James Petras y recomendamos la lectura de esta conferencia que dio en Colombia en 2007 VER en este enlace

Y de los autores que a mi juicio son clásicos para entender el modo de funcionar los mass media es Noam Chomsky el conocidísimo lingüista profesor del MIT en Massachussets. Sus libros como Manufacturing consent o Los guardianes de la libertad , escrito en conjunto con Edward Herman, son de consulta y estudio imprescindibles.

estatuto gnoseológico de las ciencias humanas, desde el materialismo filosófico

http://www.fgbueno.es/gbm/egch.htm

El estatuto gnoseológico de las ciencias humanas es un material que se trabajó en Oviedo, y que hasta el presente permanecía inédito, y ahora el Proyecto de Filosofía en Español lo hapublicado en formato pdf
En la sede de la Fundación Gustavo Bueno se acaba de presentar un video en que Gustavo Bueno, Tomás García y David Alvargonzález explican el contexto y lo esencial de estos trabajos 

 

Gustavo Bueno expone algunas tesis sobre la Idea de democracia

Accede a más trabajos que contienen las tesis sobre la democracia que plantea el Materialismo Filosófico aquí http://www.filosofia.org/mon/democra.htm

Imprescindible consulta y referencia: Las intervenciones extranjeras en América Latina, una CRONICA de Gregorio Selser

Sandino y las obras claves de Gregorio Selser 

Como podemos ver en esta presentación, el tomo IV de esta magna y esencial obra de Gregorio Selser fue “perdido” de un modo muy misterioso y aún sin explicar motivos.Casualmente es en este Tomo IV donde se puede estudiar las intervenciones extranjeras en América Latina en el período histórico más cercano a nosotros: desde 1945 hasta 1990
De cualquier modo, lo que importa es el logro de las personas que dedicaron todos los esfuerzos 
quijotescos, como los define Stephan Hasam, a rescatar y editar estos materiales que son uno más de los frutos de la labor infatigable y muy rigurosa de Gregorio Selser y su compañera y colaboradora Marta Ventura. Selser, desde su magna obra, es por lo tanto uno de los referentes cruciales para el trabajo de superación social y política, humana, de los millones de hispanoemaricanos que han sufrido mil y una formas de subyugaciones, pero que han sido y siguen siendo , desde su enorme fortaleza como pueblos, capaces de ir superando todas las voraces y viles mezquindades que como dice Hasam, desde fuera y desde dentro, lo han intentado tantas veces. Pueblos que hoy en día siguen viviendo la incansable lucha por la libertad como un hecho cada vez más firme aunque con mucho esfuerzo pendiente de consolidar en el terreno político.

Presentación de la Cronología de las intervenciones extranjeras de Gregorio Selser (UACM, 10 de noviembre de 2010)
Por 
Stephan A. Hasam

I.

Han transcurrido ya más de cuatro lustros desde que, durante los últimos meses de vida de Gregorio Selser, la socióloga María Novoa comenzara a transcribir a diskette los miles y miles de fichas de una obra, concebida en cuatro tomos, cuyo título definitivo su autor todavía no definía con exactitud. El entonces director del Centro de Investigaciones Interdisciplinarias en Humanidades (CIIH) de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), Pablo González, había acordado mediante contrato que su Centro proporcionara y colocara una herramienta modernísima en la vivienda de Selser, una flamante computadora de escritorio, y que financiara la trascripción de toda la obra. Selser había puesto como condición que los originales no salieran de casa; éstos los había rescatado Marta Ventura de su apartamento en Argentina en un viaje que realizó desde México, no exento de peligro, en plena dictadura de Jorge Rafael Videla.

Durante años Selser había intentado sin éxito interesar a alguna instancia que estuviera en condiciones de poder financiar, transcribir y publicar esta, su voluminosa obra mayor, en la que había trabajado durante más de treinta años. El pintor Oswaldo Guayasamín, convencido de la importancia de la obra, había ofrecido ilustrar la portada. Quizás fue el impacto causado por el bombardeo high-tech e guerra relámpago estadunidenses contra Panamá el 20 de diciembre de 1989 lo que finalmente ayudaría a empujar la balanza a favor de capturar y, eventualmente, a publicar esa obra.

Después de su muerte, el trabajo de captura de todas las fichas prosiguió bajo la supervisión de Marta Ventura, profesora de artes plásticas, compañera y colaboradora de toda la vida de Selser; la bibliotecaria y creadora del archivo hemerográfico del duo Selser-Ventura, ahora en el Centro de Memoria de Nuestra América Latina (CAMeNA), de la Universidad Autónoma de la Ciudad de México (UACM), conformado por más de dos millones de recortes, (todo hecho con navajas de rasurar recicladas después de las afeitadas y unas tijeras), ahora todos digitalizados para consulta en línea.

Para revisar la captura de las fichas, Marta Ventura aprendió a usar una computadora, obsequio de Carlos Payán, entonces director del diario La Jornada, convirtiéndose en una abuelita cibernética. Cuando la máquina ya no resistió el duro ritmo y la carga de trabajo a los que era sometida por Marta Ventura, Raquel Sosa, profesora-investigadora del Centro de Estudios Latinoamericanos de la UNAM, le obsequió una nueva, más potente. Durante aproximadamente tres lustros, siete días a la semana, pese a problemas de salud, Marta Ventura se ocupó de la supervisión y captura de absolutamente toda la obra periodística y ensayística de Selser; cerca de cien mil folios tiposcritos, ayudada por estudiantes de servicio social de la UNAM y de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM) de Azcapotzalco y de Xochimilco. Pendiente queda la revisión de todo ese material capturado, así como la captura de los más de treinta libros publicados, hoy casi todos rarezas bibliográficas, y varios inéditos; entre éstos, Honduras, república alquilada, vol. II y Los otros militares.

El siguiente paso fue encontrar financiamiento y a quien estuviera dispuesto a publicar esa enorme obra (1) en proceso de captura. En particular Adriana Lombardo y Luis Monter de la Universidad Obrera de México asumieron esa búsqueda de manera extraordinariamente intensa. En la co edición del primer tomo (1994) (2), participaron el CIIH de la UNAM, la Universidad Obrera de México, la UAM-Azcapotzalco, y la Universidad de Guadalajara. Tres años después, en el segundo tomo (1997) (3), ya no participó la Universidad de Guadalajara. (Estos dos tomos aparecieron como cuadernos.) Cuatro años después, del tercer tomo (2001) (4) se retiró la UAM-Azcapotzalco. Ante las abrumadoras dificultades editoriales y económicas, fueron los propios trabajadores de la Universidad Obrera de México y el editor Luis Monter, convencidos de la relevancia histórica de la obra que, en recuerdo solidario del “Maestro Selser”, acordaron armar y publicar ese tercer tomo con sus propias manos.

Conseguir y juntar los tres tomos existentes hasta ahora es una tarea casi imposible. Su distribución es inexistente. Dos tomos están agotados y ninguno cuenta con un índice onomástico funcional. La búsqueda de una referencia en esa enorme obra es imposible, sin antes saber la fecha. Adicionalmente, quedó más que evidente que los tres tomos pioneros estaban en urgente necesidad de una revisión minuciosa, integral, idónea, auxiliada por las nuevas herramientas cibernéticas e Internet, disponibles hoy para búsqueda y cotejo de datos, fechas, lugares y nombres. Además, la publicación de la obra completa había quedado truncada, pues faltaba el cuarto tomo.

Plantear en las actuales circunstancias la publicación completa de los cuatro tomos era algo descabellado; que fuera hecha por una universidad pública naciente, estrangulada económicamente por los ataques feroces contra la educación, salud y seguridad públicas, era una locura imposible.

El poeta León Felipe, exiliado en México, escribió alguna vez que en España faltaban locos (como Don Quixote), que todo mundo estaba terriblemente cuerdo, refiriéndose a la vida social en el nacional-catolicismo y fascismo españoles. Este plantel de la UACM es la sede, al menos de dos locuras quixotescas hechas realidad vertiginosamente: CAMeNA-Archivo Selser-Ventura, consultable en línea y conformado según estándares internacionales, y la edición y publicación de la obra completa Cronología de las intervenciones extranjeras (1776-1990) de Gregorio Selser en cuatro tomos. Pero hay dos pequeñas sorpresas más: la publicación de la obra completa en un DVD (Tomo V), lo que permite la consulta y búsqueda electrónicas de cualquier dato y la puesta en venta de este tomo a bajo costo, accesible a un público interesado inmensamente amplio, incluyendo al estudiantado.

II.

Poco antes de morir, Selser ponderaba finalmente qué título ponerle a la obra que rebasa límites y no cabe estrictamente en género alguno. Era a primera vista una cronología, pero a la vez una enciclopedia. Era una enciclopedia, pero ordenada cronológicamente. Pero era algo más, pues contenía reflexiones, síntesis y contextualizaciones que no corresponden comúnmente ni a una cronología, ni a una enciclopedia. Finalmente Selser había optado por un título fácilmente aprehensible y que, en un primer plano, caracteriza la obra: Cronología de las intervenciones extranjeras en América Latina (1776-1990).

Está dividida en cuatro periodos históricos: desde la fundación de Estados Unidos en 1776 a la guerra contra México de 1848 (Tomo I); de 1849 a la guerra contra España de 1898 (Tomo II); de 1899 al fin de la Segunda Guerra Mundial en 1945 (Tomo III); de 1946, creación del orden imperial de la posguerra, hasta el fin de la Guerra Fría y la invasión contra Panamá de diciembre de 1990 (Tomo IV).

El autor dejó el Tomo IV inconcluso al morir. Ana María Sacristán y Guillermo Fernández, editora e historiador respectivamente de CAMeNA, ahora los mayores conocedores de esta obra, asumieron la desafiante tarea de rescatar y reconstruir los archivos del tomo IV que habían sido capturados años atrás, (cuyos originales siguen desaparecidos hasta el día de hoy (5) ), limpiarlos de basura cibernética y ordenarlos cronológicamente. Después, ambos investigadores se sumergieron en los tres tomos anteriores, los estudiaron a fondo, los revisaron palabra por palabra, corrigieron infinidad de erratas, elaboraron un índice exhaustivo y se adentraron en la lógica y espíritu del autor, para finalmente volver al Tomo IV y emprender su edición en sintonía con los anteriores, pero dejándolo como su autor lo dejó: incompleto.

Esta voluminosa obra sobre América Latina, cuyo leitmotiv son las intervenciones extra continentales y de Estados Unidos desde el día en que nació esta potencia hasta Blitzkrieg contra Panamá el 20 de diciembre de 1989, es única, no sólo por su alcance, sino por su originalidad. Ninguna persona estudiosa de la política internacional hemisférica podrá prescindir de ella por su riqueza enciclopédica, por la manera en que ordena y contextualiza los datos y documentos in extenso reproducidos. Es una obra de consulta invaluable, imprescindible y, a la vez, mucho más que eso: es el museo de las intervenciones extranjeras en América Latina construido paciente y meticulosamente por Selser durante más de treinta años; un museo que esclarece e invita a descubrir y rememorar, y en cada nueva visita a configurar una nueva comprensión, revisión y reinterpretación de los datos, acontecimientos históricos y su interconexión.

Al presentar el Tomo I de la Cronología póstuma de Selser en 1995, Sergio Bagú dijo que era “lo que podríamos llamar una obra magistral” que “quedará como una obra monumental de referencia; una especie de reconstrucción metódica y precisa de la ‘columna vertebral’ de la historia de los pueblos latinoamericanos [...] Una obra cuyo valor histórico y cuya proyección en la formación de una conciencia continental son verdaderamente excepcionales (6) ”.

Lo que quiso Gregorio Selser –acotó Bagú– fue reconstruir un hilo histórico que transcurre a lo largo de más de dos siglos, durante los cuales los países latinoamericanos han debido soportar la intervención directa de potencias extra continentales, europeas, y de Estados Unidos.” En la Cronología de Selser, aseveró Bagú, “está el germen preciso de una historia global de los países latinoamericanos, cuyo nexo de unión está dado en este caso por las invasiones. Aquí América Latina se presenta como una unidad [...] como un conjunto de países que tienen algún nexo subterráneo muy estrecho, y una historia que tiene rasgos comunes fundamentales.”

Bagú se preguntó, “¿cómo pudo ser afrontada una obra de esta magnitud por un solo autor? Normalmente esto es una tarea de conjunto, de varios autores, de institutos completos.” Fue posible, contestó, porque Selser contaba con “un orden mental muy riguroso [...] orden que tiene que estar apoyado por un archivo que uno llamaría perfecto. Sin ese archivo perfecto de los datos, este intento de cronología se podría haber transformado en un verdadero caos, porque es bastante aventurado querer reconstruir la historia de tantos países latinoamericanos desde el punto de vista de las intervenciones extranjeras a lo largo de más de un siglo, siglo y medio, dos siglos.”

Todos los libros de Selser, sustentados en una cantidad colosal de datos desenterrados por él, buscaban esclarecer el pasado y un presente, en perpetuo flujo e imposible de atrapar, para incidir en el futuro, proporcionando herramientas esclarecedoras a una lucha social emancipadora, sustentada en los derechos humanos universales. Era un proceso dinámico de análisis permanente en al menos dos planos:

1. Sólo al esclarecer el pasado (investigación histórica) era posible echar luz sobre las raíces del devenir del presente. En otras palabras, el conocimiento histórico ilustrado era la premisa sine qua non para intentar esclarecer cualquier acontecimiento en el presente. Cada evento de este acontecer que Selser tomaba para su nota periodística diaria era previamente seleccionado con ojo de historiador, y era ubicado con precisión en su contexto histórico allí mismo, en una nota periodística, o en algún ensayo.

2. Simultáneamente, ante el caos masivo del flujo de los eventos cotidianos, Selser en su función de periodista seleccionaba, identificaba, documentaba y elaboraba aquellos que, desde la perspectiva de colocarse él en la óptica de un historiador viviendo muchas décadas a futuro, pudiera encontrar relevante que hubieran quedado en el registro histórico por su relevancia esclarecedora.

Mnemósyne (Memoria) es la madre de las musas; entre ellas, Clío. Sin ellas la vida social retorna al estado salvaje. En contra de Memoria y sus hijas civilizadoras aparecieron las musas falsas, las piérides, hijas de Pieros, quienes con su canto obscurecían todo y acabaron convertidas en urracas. La negación de la memoria y del esclarecimiento conduce a una época obscura y de obscurantismo, al salvajismo.

El esclarecimiento que Selser perseguía a través de sus libros y de sus notas periodísticas diarias esclarecía y, por lo tanto, socavaba el manejo obscuro y manipulativo de interpretación de los acontecimientos cotidianos y de la historia por parte de las urracas: los medios masivos de difusión y la historiografía hegemónica obscurecedora, respectivamente, que apuntalaban –y siguen apuntalando– al imperialismo proveniente desde fuera y el interno, el hispanoamericano, consumado por los conquistadores medieval-tridentistas, de cruz y espada, y sus descendientes; el imperialismo guiado por desgnio de la Providencia y el “conquistismo” mariano con su compulsión irrefrenable de voracidad subyugadora—los dos brazos asimétricos de una pinza de salvajismo depredador insaciable en dinámica interacción (hasta hoy), que permea toda la vida social liberando todas sus pulsiones necrofílicas, ahogándola en un río infinito de atrocidades sin fin. “El Dorado” es la muerte, diría hoy día el sabio Rey Midas, después de aprender su lección.

La publicación de la Cronología completa es un logro editorial de trascendencia histórica para las ciencias sociales en América Latina. Es un sueño hecho realidad gracias a las locuras románticas, quixotescas, de Beatriz Torres, fundadora de CAMeNA, y a la administración de una universidad que se atrevió, presumible y comprensiblemente, no sin temor, no sólo a dar la oportunidad para que ocurrieran estas locuras, sino para financiarlas en tiempos de la mayor adversidad y de urgentes necesidades.

Lo único que los seres humanos le pueden heredar a sus descendientes para ayudarles en el futuro a entender su presente en flujo perpetuo heracliteano, y a encontrar formas de vida social menos salvajes y atroces, es el seguir convirtiendo a las pierides en urracas, a seguir desplazando la obscuridad con esclarecimiento histórico, con la ayuda de Memoria y sus hijas, en particular Clío. Esta edición completa de la Cronología de Selser es una contribución mayor a esa herencia.

NOTAS
1- Es necesario alertar y dejar asentado el dato para el registro histórico de que diskettes que contenían un fragmento del Tomo I fueron copiados y su contenido apareció misteriosamente publicado en bruto en versión pirata hecha al vapor, plagado de erratas, en Alemania(¡!) con el título de “Enciclopedia”, obra de cuatro autores: Gregorio Selser, Klaus Meyer, Bruni Höfer y Alvaro Garcia, Enciclopedia de las intervenciones extranjeras en América Latina, Monimbó, e.V., Dietzenbach, 1992: (ISBN: 9783891441350). Muchas bibliotecas estadunidenses y europeas lo adquirieron y aparece en los acervos.
2- Cuadernos del CIIH, Serie Fuentes #12; Gregorio Selser, “Cronología de las intervenciones extranjeras en
América Latina – Tomo I: 1776-1848”, México, D.F., Universidad Autónoma Metropolitana –
Azcapotzalco, Universidad de Guadalajara, Universidad Nacional Autónoma de México (Centro de
Investigaciones Interdisciplinarias en Ciencias y Humanidades), Universidad Obrera de México, 1994, 392
pp.
3- Cuadernos del CIIH, Serie Fuentes #14; Gregorio Selser, “Cronología de las intervenciones extranjeras
en América Latina – Tomo II: 1849-1898” con introducción de John Saxe-Fernández y prólogo de Sergio
Bagú, México, D.F., Universidad Autónoma Metropolitana – Azcapotzalco, Universidad Nacional
Autónoma de México (Centro de Investigaciones Interdisciplinarias en Ciencias y Humanidades),
Universidad Obrera de México, 1997, 393 pp.
4- Gregorio Selser, Cronología de las intervenciones extranjeras en América Latina – Tomo III: 1898-1945, con introducción de John Saxe-Fernández, México, D.F., Universidad Autónoma Metropolitana – Azcapotzalco, Universidad Nacional Autónoma de México (Centro de Investigaciones Interdisciplinarias en Ciencias y Humanidades), Universidad Obrera de México.
5- Marta Ventura, al final de la década de los 90, accedió a prestar los originales del cuarto tomo al Centro de Investigaciones Interdisciplinarias en Ciencias y Humanidades (CIIICH) de la Universidad Nacional Autónoma de México. El Tomo IV desapareció; tanto los originales que tan celosamente cuidaba Selser, como los diskettes. Es sólo gracias al respaldo en diskettes que Marta Selser había hecho por precaución, que fue posible, con mucho trabajo, rescatar y reconstruir ese tomo. Sigue abierta la pregunta: ¿Dónde están los papeles originales? ¿Quién se los apropió? Uno o ambos directores de entonces, Pablo González y su sucesor, Daniel Cazes, en su capacidad de titulares del Centro, le deben hasta el día de hoy una explicación a Marta Ventura y al mundo de las ciencias sociales de América Latina. Los originales desaparecidos le pertenecerían ahora a la UACM, específicamente al Archivo Selser-Ventura de CAMeNA.
6- Sergio Bagú: todas las citas son transcripciones de grabación de la presentación del primer tomo de la Cronología de las intervenciones extranjeras en América Latina (1776-1848), Casa Jesús Reyes Heroles, Coyoacán, México, D.F., 23 de mayo de 1995.

México, D.F., 10. Nov. 2010

Carlos Fazio analiza el proceso de militarización y paramilitarización de México

 

GUERRAS Y POLITICAS DE ESTADO EN MEXICO EN TIEMPOS DE GLOBALIZACION NEOLIBERAL 

UN ESTUDIO CRITICO MATERIALISTA PLANTEADO POR EL ANALISTA CARLOS FAZIO DESDE MEXICO

¿una mezquita en Ground Zero de Nueva York? algunas razones en contra

¿una mezquita en Ground Zero de Nueva York? algunas razones en contra

El tema de la quema de ejemplares del Corán, libro sagrado de los musulmanes,anunciada para el sábado 11 de septiembre de 2010, aniversario del ataque a las Torres Gemelas, no es simplemente una cuestión derivada del fundamentalismo de un pastor protestante de una pequeña ciudad en los Estados Unidos, un tal Terry Jones. Todos los medios de comunicación se han hecho eco de la cuestión con un nivel de intensidad informativa casi increíble. Pero realmente es un asunto de gran importancia, no sólo política sino , nos parece, filosófica, ya que tras esta noticia hay muchos asuntos que necesitan ser criticados en base a la dialéctica materialista
Desde el asunto de las caricaturas de Mahoma en Dinamarca no se había visto semejante movilización en torno a cuestiones de este tipo.

Según tengo entendido, cuando un grupo de mahometanos rezan en un determinado lugar, es decir, donde se erige una mezquita para el culto a Alá, su dios, desde ese momento tal territorio se convierte en territorio sagrado y perteneciente al Islam, desde una perspectiva de FE religiosa. La conclusión de este silogismo (independientemente de su validez lógica)es bastante sencilla de ver.

En torno a estas cuestiones, he leído hoy , sábado 11 de septiembre de 2010 un comentario de lector anónimo en un sitio web
que me ha parecido interesante compartir con los visitantes de introfilosofia
FUENTE http://www.truth-out.org/911-the-rest-should-be-silence63105

9/11: The Rest Should Be Silence
Friday 10 September 2010
by: Michael Winship, t r u t h o u t | Op-Ed

Next to Trinity Church the tribute made of light honors the victims of 9/11. (Photo: Barry Yanowitz / Flickr)
This past Sunday was beautiful, bright and warm, not unlike the sky blue day when those two airliners hit the World Trade Center in 2001, just a mile or so from where I live. That day, a Tuesday, was a bit hotter, a bit more humid, yet just as sunny and promising.

But this Sunday morning’s silence was broken by the sound of a bell and a small, organized crowd of friendly people chatting quietly among themselves, walking south down Seventh Avenue, the street that runs beneath my apartment windows, escorted by police and fire vehicles. With a prompt from the news on my radio, I remembered that this was an event that now takes place every year on the Sunday before the anniversary of 9/11.

The people walk in memory of Father Mychal Judge, the Franciscan priest who died at the World Trade Center, the attack’s first officially recorded death, designated Victim 0001. Chaplain for the New York City Fire Department, Father Judge had rushed to the disaster scene, delivered last rites to the dying, then gone inside the lobby of the north tower, praying for all those at ground zero, but especially for his friends, the firefighters.

“Jesus, please end this right now! God, please end this!” he was heard to exclaim. And then the south tower collapsed. Debris came crashing through the north lobby. Father was struck and fell, dead – “blunt force trauma to the head,” the coroner’s report read.

It would be foolish to pretend to know what Father Judge would make of the controversy over Cordoba House, the proposed Islamic center downtown, a couple of blocks from ground zero, but there may be a clue in the words of the homily he delivered just the day before 9/11. “No matter how big the call, no matter how small, you have no idea what God is calling you to do,” he said. “But God needs you, He needs me, He needs all of us.”

All of us. Not just Christians or Jews, but Muslims, Buddhists, Hindus, agnostics, atheists, the right, the left, everyone. Father Judge himself was both gay and a recovering alcoholic, struggles that gave him particular insight into the plight of all too many misunderstood souls working to make their capacity for love, compassion and courage known and accepted as equal to anyone else’s.

So, all of us have a role to play and none of them should involve inflaming hatred and prejudice among us; none of them should involve violating the rights of others or considering oneself superior to another or burning the scripture of those the ignorant and opportunistic want us to believe are evil or unholy.

Writing in Wednesday’s New York Times, Feisal Abdul Rauf, chair of the effort to build Cordoba House and imam of the Farah mosque already in lower Manhattan, said, “These efforts by radicals at distortion endanger our national security and the personal security of Americans worldwide. This is why Americans must not back away from completion of this project. If we do, we cede the discourse and, essentially, our future to radicals on both sides. The paradigm of a clash between the West and the Muslim world will continue, as it has in recent decades at terrible cost. It is a paradigm we must shift.”

Just returned from two months in the Middle East on behalf of the State Department, seeking conciliation between Muslims and other religions, Rauf continued, “Let us commemorate the anniversary of 9/11 by pausing to reflect and meditate and tone down the vitriol and rhetoric that serves only to strengthen the radicals and weaken our friends’ belief in our values.”

Reflect and meditate in silence, please. Many have urged that September 11 this year not be a time of demonstrations for or against Cordoba House or any other issue; rather, let it be a quiet day of commemoration and mourning.

The last time I attended the September 11 ceremonies at ground zero, on the fifth anniversary in 2006, as the names of the dead were read, solemn tranquility was disrupted and disrespected by those who tried to use the occasion to draw attention to themselves, crassly intruding with their conspiracy theories and raucous agendas.

And quiet, please, not only because it is a mark of respect for the deceased and their friends and families, but also because it is the sound of silence that many New Yorkers find so evocative of those days just after the attacks. Our streets closed to regular traffic, patrolled by police and the National Guard, we wandered in mute disbelief at what had happened, at the enormity of our loss. Even the emergency vehicles that raced along the empty streets did so without their sirens. We murmured softly among ourselves, looking for answers as many of our fellow citizens still searched for news of their missing loved ones.

Let our loss be what we remember on Saturday. That, and the words of St. Francis of Assisi, founder of the order of friars to which Father Mychal Judge devoted himself: “Lord, make me an instrument of your peace; where there is hatred, let me sow love; where there is injury, pardon; where there is doubt, faith; where there is despair, hope; where there is darkness, light; and where there is sadness, joy.”

This work by Truthout is licensed under a Creative Commons Attribution-Noncommercial 3.0 United States License.

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Michael Winship is senior writer at Public Affairs Television.

COMMENTS
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The ground zero mosque is
Fri, 09/10/2010 – 15:17 — Anonymous (not verified)
The ground zero mosque is great for the anti-Islamist cause, so I am all for it. It has created a “teachable moment” for the dangers of Sharia to be understood more fully. Never has interest in studying about Islamism been so high. What a gift!

And, by the way, what people object to is politics, not religion. We have every right to criticize political groups.Putting political messages in a “holy” book does not make these messages immune from criticism. Not all Muslims are Islamists, but many, many are, and their Islamist agenda should be criticized by everyone. Since Islamists base their political ideology on passages of the Koran, we have every right to criticize those passages of the Koran, too. No one is obligated to think the Koran is holy except, apparently, Muslims. Non-Christians don’t seem to think the Bible is holy. So what? If Muslims want us to respect their holy book, then they can start interpreting it in a way that does not lead to imposing Sharia law. The ball is in their court.

The ground zero imam is a big proponent of Sharia who thinks our laws should be Sharia-compliant and we should have laws against blasphemy. We are under no obligation to give him any encouragement, just as Democrats are under no obligation to give Republicans any encouragement in advancing their political agenda. If Democrats are not bigots when they criticize Republicans and their political beliefs, then the same is true for anti-Islamists when they criticize Islamists and their political beliefs.

There are some admirable secular Muslims out there, such as Zuhdi Jasser, who are attempting to reinterpret the Koran in a non-political manner. Tellingly, he is against the ground zero Mosque.

el papel de la propaganda en las sociedades políticas del presente

El libro titulado Guerra imperial y desinformación, del periodista e investigador Carlos Fazio resulta de un interés especial entre otras razones, por el tipo de análisis crítico que encontramos en sus planteamientos y explicaciones, estudios de caso, sobre el curso y estructuras de las relaciones políticas con la práctica de lo que se llama eufemísticamente hoy en día las relaciones públicas y en otras épocas directamente conocido como  propaganda 

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la fe del ateo, un análisis desde el materialismo filosófico de Gustavo Bueno sobre las religiones y el ateísmo